Mi trayectoria profesional y musical comenzó en Ituzaingó, Buenos Aires, Argentina, donde, en mi adolescencia, cursé estudios de química mientras comenzaba a explorar el mundo de la música. Durante estos años, me uní a un trío de rock progresivo, una experiencia que me permitió, por primera vez, comprender el poder de la creatividad. La formación técnica en química me aportó no solo conocimientos académicos, sino también una mentalidad orientada a la investigación, a la precisión y a la exploración. Estas habilidades pronto se trasladaron al ámbito musical, llevándome a un estudio más serio y formal de la armonía moderna y del jazz, géneros que capturaron mi interés por su complejidad y riqueza expresiva.

 

Este enfoque se manifestó plenamente en 2014, cuando comencé a reparar las guitarras de mis alumnos de guitara.  Lo que empezó como un favor para mejorar sus instrumentos rápidamente encendió en mí una fascinación por la construcción de guitarras. La posibilidad de trabajar la madera, respetando su carácter natural y sus propiedades acústicas, para construir una Guitarra personalizada, se convirtió en una pasión. Cada elemento del proceso de construcción es una búsqueda de equilibrio, de armonía entre los materiales, la técnica y el diseño, logrando que cada guitarra no solo sea única en su sonido, sino también en su personalidad y carácter. Para mí, la construcción de un instrumento es una manera de cerrar el círculo en mi relación con la música

 

En la actualidad, mi trabajo abarca diversas actividades en el ámbito de la música y la luthería. Realizo el mantenimiento de instrumentos como las guitarras y los pianos. Además, la construcción de guitarras artesanales ocupa un lugar central en mi práctica. Este proceso es mucho más que una actividad técnica: es un arte que exige dedicación, precisión y sensibilidad. Cada guitarra que construyo es el resultado de un cuidadoso proceso de selección de maderas, modelado y ajuste, para lograr un instrumento que se destaque tanto por su belleza estética como por su capacidad sonora. Por otro lado, la interpretación musical siguen siendo parte fundamental de mi vida, permitiéndome mantener una conexión directa con la música y entender mejor las necesidades de los músicos que utilizan mis instrumentos.

 

Formación y Experiencia

 

- 2003 - En Huelva estudié armonía moderna y jazz bajo la guía del profesor Antonio Esperón, una experiencia que fue fundamental en mi comprensión de la estructura y el lenguaje de la música. También recibí lecciones del profesor de jazz Pedro Bellora, cuyas enseñanzas me brindaron una nueva perspectiva.

 

- 2014 - La curiosidad por el mundo de los instrumentos no se limitó a las guitarras. Decidí profundizar en la afinación y regulación de pianos, formándome bajo la supervisión del pianista y afinador Franco Botti. Esta experiencia me permitió comprender mejor la estructura interna y el funcionamiento de los pianos, aportándome conocimientos sobre la importancia de la precisión y el cuidado en el mantenimiento de instrumentos, una habilidad que considero esencial en mi trabajo.

 

- 2016 - Estudié en la escuela del luthier Carlos Juan Busquiel, donde me formé en la fabricación de guitarras, abordando aspectos fundamentales del diseño, la acústica y el trabajo de la madera. Bajo la guía de Busquiel, adquirí conocimientos prácticos y teóricos esenciales, desde la selección de las maderas hasta la construcción de la caja y el mástil, y sobre cómo cada detalle influye en el sonido y la resonancia del instrumento. Esta experiencia marcó un punto de inflexión en mi carrera, dándome las herramientas necesarias para comenzar a crear guitarras de alta calidad que satisfagan tanto las necesidades técnicas como artísticas de los músicos.

 

Mi compromiso con la luthería y la música se traduce en una búsqueda constante de la excelencia en cada uno de los instrumentos que fabrico. La construcción de guitarras es para mí un arte y una responsabilidad; cada pieza que creo refleja no solo conocimientos técnicos, sino también mi dedicación a la autenticidad y a la precisión. Esta dedicación se plasma en la creación de instrumentos únicos y en ofrecer un servicio personalizado y de alta calidad, con el objetivo de que cada guitarra o instrumento no solo cumpla su función musical, sino que inspire a quienes lo interpretan.